Un gran triunfo
La ley de seguridad ciudadana aprobada en el Congreso no criminaliza la protesta, la fortalece. Reafirma el postulado constitucional de que la ciudadanía puede reunirse y manifestarse de manera pacífica. Lo que lograremos es separar la protesta del vandalismo, los bloqueos y la destrucción. Durante el paro del 2021, la encuesta Invamer mostró que el 79% de los ciudadanos estaba en contra de los bloqueos, y el 95% contra la violencia y, sin embargo, mostraban empatía con las causas del paro. La ley de seguridad ciudadana aumenta las penas de delitos callejeros cuando emplean máscaras o elementos que oculten la identidad. Agrava los delitos cuando hay ataques contra la Fuerza Pública, menores de edad o periodistas. Aumenta penas para quienes ataquen la infraestructura pública, como los sistemas de transporte. La ley pretende poner un límite a las infiltraciones violentas en las protestas pacíficas. Uno de los grandes dolores en las ciudades es que los criminales de delitos menores ...